14 de marzo. Jack's, un minuto
Ayer, casi a las doce de la mañana volviendo en coche des de Mollet me asalta el buen humor y el optimismo, ganas de cosas bonitas, le dije a Uve un rato más tarde, plenamente consciente de la ingenuidad. La conversación con un mendocino, redondito, moreno y de ojos claros había sido agradable. Ese humor ligero, de media sonrisa, esa amabilidad, todo bien-
En una semana con demasiadas cosas en la cabeza voy al gimnasio y me acuesto pronto Duermo mucho y sueño mucho. Se fija en el recuerdo un abrazo soñado, con perfume mediterráneo, de esos que relajas el torso y quién te abraza te sostiene y sientes que respira en tu hombro.
El cedro parece escamoso y marrón y del ciprés una rama que parece que se desgaja. Periódicos al sol y deseos de caderas amorosas que se abran a la brisa llena de pólenes de la primavera.
Sabe bien el café y mojarse las membranas con Jack’s frío.
En una semana con demasiadas cosas en la cabeza voy al gimnasio y me acuesto pronto Duermo mucho y sueño mucho. Se fija en el recuerdo un abrazo soñado, con perfume mediterráneo, de esos que relajas el torso y quién te abraza te sostiene y sientes que respira en tu hombro.
El cedro parece escamoso y marrón y del ciprés una rama que parece que se desgaja. Periódicos al sol y deseos de caderas amorosas que se abran a la brisa llena de pólenes de la primavera.
Sabe bien el café y mojarse las membranas con Jack’s frío.
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