lunes, julio 21, 2008

20 de julio

El miércoles cuando rompía el alba como un a Europa un espectro un retortijón recorría mi intestino.

El lunes pinché una rueda y me manché las manos, el pantalón y una camisa mora de grasa y mugre de suelo de garaje.

Creo que era el jueves cuando saliendo del vagón a eso de las diez de la noche sentí los perfumes recalentados por el día de las mujeres que se acercaban a la puerta.

También me contaba VK su orgullo herido y se impacientaba buscando respuestas. Y la única respuesta es It ain’t him, babe. Hace años, 7 u 8, me imaginaba cantando el It ain’t me, babe, cambiando el me por el him.

no es él a quien quieres, amor
él sólo te decepcionará
dices que buscas a alguien
que te prometa no abandonarte nunca
alguien que cierre los ojos por ti
alguien que cierre su corazón
alguien que muera por ti y más
pero eso no es él, amor
no, no, no, eso es él, amor
no es él lo que andas buscado, nena.


Fúndete de nuevo con la noche, amor
todo aquí está hecho de piedra
no hay nada aquí que se mueva
y además no estoy solo
dices que estás buscando a alguien
que te recoja cada vez que caigas
que recoja flores todo el tiempo
y acuda cada vez que le llames
un amante para toda la vida y nada más,
pero eso no es él, amor

_____________________________________

Rizos ingrávidos me besaba la frente por llevarle un zumo de pera.

Y durante la semana una pulsión de amor, espectral como el retortijón, inconcreta y sin rostro, que vuela sin posarse en ninguna rama.